La incidencia de la diabetes y la obesidad en la población mundial lleva aumentando de tal manera en los últimos años que la OMS ya habla de ello como: “la epidemia del siglo XXI”.
Se sabe que más de la mitad de la población mundial tiene sobrepeso, lo que está íntimamente ligado al aumento de la diabetes tipo 2, llevando a los médicos a acuñar el término “Diabesidad” que engloba ambas patologías.
La cuestión más importante que se nos plantea frente a estos hechos es ¿cómo se pasa de sufrir obesidad a diabetes tipo 2? Y lo más importante, ¿cómo podemos llegar a prevenirlo?
Del punto A al punto B: de obesos a diabéticos
Se sabe que junto a la edad, la predisposición genética y el sedentarismo, la obesidad es uno de los principales factores de riesgo para sufrir una diabetes tipo 2.
El paso de obesidad a diabetes comienza con un fallo progresivo en la producción de insulina en nuestro organismo, que a su vez coincide con un aumento progresivo de la resistencia a dicha insulina:
- Fallo en la producción de insulina: Cuando una persona sufre obesidad su organismo debe producir más insulina para llevar glucosa a las células que conforman su tejido adiposo, incluso para mantener unos niveles normales de glucosa en sangre. Esto hace que el páncreas trabaje con sofrebesfuerzo y termine fatigado, llegando a reducir su capacidad para producir insulina.
- Resistencia a la insulina: El exceso de peso puede producir resistencia a la insulina. Las células ven su sensibilidad reducida y no dejan pasar la glucosa a su interior para ser alimentadas.
Se puede prevenir
Con pequeños cambios en nuestro modo de vida podemos reducir la probabilidad de sufrir diabetes tipo 2. Controlar nuestro peso y reducir la grasa de la zona abdominal son factores clave para ello, además de evitar otros problemas metabólicos asociados al exceso de peso.
Según el “Diabetes Prevention Program” (DPP) del Instituto Americano de diabetes y enfermedades digestivas y del riñón, bajar de peso reduce la probabilidad de sufrir diabetes tipo 2.
De las 3000 personas que participaron en el DPP, un 7% llegó a reducir las probabilidades de sufrir una diabetes tipo 2 en un 58%.
Las 7 claves de la prevención
Estas medidas nos ayudarán a mantener la diabetes tipo 2 a raya disminuyendo nuestras probabilidades de sufrirla:
- Procura dormir bien: tener un sueño de calidad, dormir las horas necesarias y mantener un horario regular durante la semana, será de gran ayuda.
- Incrementa tu actividad física: camina, baila, monta en bici durante al menos 150 minutos semanales (media hora cada día, durante 5 días) para ejercitar tu cuerpo de manera moderada y reducir tu peso.
- Sigue una alimentación saludable: come frutas, verduras y evita productos ricos en azúcar y grasas saturadas como refrescos, alimentos procesados y alcohol.
- Bebe agua siempre que tengas sed: si tu organismo lo pide es por algo.
- Evita el estrés en la medida de lo posible.
- Mantén el peso saludable una vez conseguido: no dejes ir por lo que tanto has luchado.
- Ponte metas razonables: las montañas se escalan poco a poco, no saltando de la base a la cima.
La OMS ya lo advierte, la obesidad y la diabetes son la epidemia de nuestro siglo. Están estrechamente relacionadas la una con la otra, tanto que han terminado acuñando el término “diabesidad” para englobar todo lo relacionado con ambas patologías.
Si bajar de peso ya es importante para nuestra salud de por sí, añadir el factor de la prevención a sufrir una diabetes tipo 2 lo hace un objetivo aún más importante. Por suerte contamos con herramientas a nuestro alcance para evitarlo y disfrutar de una vida mucho más saludable y feliz.