Como siempre hemos dicho, el sobrepeso y la obesidad no es solo cuestión de estética, sino también de salud. La calidad de vida relacionada con la salud de las personas con obesidad va disminuyendo a medida que crecen en peso. Saber realmente hasta que punto pueden verse afectados, tanto física como psicológicamente, es importante para crear conciencia sobre la prevención de esta enfermedad
¿Qué entendemos por calidad de vida relacionada con la salud?
La calidad de vida relacionada con la salud se refiere a la parte de esa calidad de vida que se ve alterada cuando padecemos una enfermedad o que mejora cuando sanamos. Aunque no siempre somos conscientes de ello, hay muchos factores que afectan nuestro día a día que pueden impedir que vivamos plenamente como deseamos.
El concepto de calidad de vida aparece en la sociedad occidental cuando la esperanza de vida aumenta, unido a la idea de que la medicina, no solamente debe adoptar el papel de proporcionarnos más años de vida, sino que debe ofrecernos una mayor calidad para esos años.
En 1948 ya la Organización Mundial de la Salud (OMS) definió el estado de salud como «no solo la ausencia de enfermedad o dolencia, sino como un estado completo de bienestar físico, mental y social”.
¿En qué nos fijamos para medir la calidad de vida?
Los factores que valoramos para evaluar la calidad de vida son instrumentos multidimensionales que abarcan sensaciones subjetivas relacionadas con el bienestar, aspectos físicos, emocionales y sociales:
- La percepción de la salud
- La salud comparada
- El estado funcional físico:, es decir, movilidad o la forma física, entre otros.
- El área social: nuestra integración y participación en la sociedad, la intimidad, etc
- El estado psicológico, donde vemos la afectividad, nuestra autoestima, la depresión,
etc.
Esferas en las que el obeso ve afectada su calidad de vida
Hasta hace poco, la calidad de vida se medía atendiendo al impacto que la obesidad tenía sobre la morbimortalidad, de tal modo que nos centraremos más en los problemas sociales y el coste que esta generaba. Recientemente, este enfoque ha cambiado y el tema de la obesidad se aborda atendiendo a todas las esferas que se ven afectadas en el individuo que sufre esta enfermedad.
¿Qué esferas se ven afectadas por la obesidad?
Relacionados de forma directa con el exceso de grasa corporal:
- El individuo ve afectado su estado físico, la vida cotidiana del obeso se ve alterada a la hora de caminar, subir escaleras, hacer deporte, etc. Tienen más dolor corporal, mayor número de preocupaciones y peor percepción de su salud.
- También puede derivar en problemas mentales, los cuales influyen en la autoestima, lo que puede llegar a provocar incluso depresión.
- Problemas sociales, las personas que sufren obesidad ven afectadas su relación con los demás, incluso pueden llegar a tener problemas de integración social. Las relaciones sexuales pueden verse afectadas en personas que sufren esta enfermedad.
Relacionados con las complicaciones orgánicas derivadas de la obesidad:
La obesidad trae consigo comorbilidades asociadas que alteran significativamente la calidad de vida. Entre las más comunes encontramos:
- Artropatías
- Diabetes mellitus H
- Hipertensión arterial
- Arteriosclerosis.
Las personas obesas poseen un estado de salud global peor que las que no sufren esta enfermedad, por ejemplo, los índices de ansiedad y depresión son superiores a los del resto de la población. También las enfermedades crónicas como, claudicación intermitente, lesión espinal y melanoma maligno generalizado, entre otras, son más habituales en personas obesas. Por último, decir que es más frecuente la morbilidad psiquiátrica en los obesos mórbidos.
Relacionados con el pronóstico vital y su percepción:
Un individuo obeso tiene mayor probabilidad de padecer enfermedades cardiovasculares o hipertensión y, al ser consciente de esos riesgos, su salud mental se ve afectada.
Además, es más propenso a padecer dolor físico y ver limitada por este su función física. La vitalidad en estas personas es menor y tienen menos energía para llevar a cabo cualquier actividad que implica movimiento.
¿Cómo afecta la reducción de peso al bienestar?
Hay estudios realizados que recogen cómo ha mejorado la calidad de vida en distintas áreas de la persona, (en la movilidad, la autoestima, la confianza, en la actividad sexual, etc) tras la pérdida de peso.
En concreto, uno publicado recientemente, Van Gemert et al. ha estudiado a 62 pacientes obesos mórbidos sometidos a cirugía bariátrica y a un grupo control. Estos sujetos presentaban una baja calidad de vida en todas las áreas, de forma especial en movilidad, dolor corporal y energía.
Tras reducir su peso notaron una mejoría importante que aumentó aún más tras 6 meses de la intervención quirúrgica, incluso los hábitos alimenticios mejoran en estas personas El seguimiento posterior a la intervención demuestra que los pacientes presentan una mayor calidad de vida cuando la pérdida de peso es mayor.
Comparados los sujetos obesos tratados de manera convencional con los intervenidos quirúrgicamente, apreciaron que esa mejoría en la calidad de vida es mucho mayor en los segundos.
Conclusiones sobre la obesidad, pérdida de peso y la calidad de vida:
- La obesidad influye de forma muy negativa en la calidad de vida y sobre todo en la movilidad de nuestro día a día, perjudicando también la vida social y la salud mental.
- Existe relación entre el grado de obesidad y la distribución de la grasa con la calidad de vida.
- En la mayoría de los casos, los obesos que solicitan tratamiento lo hacen por el deterioro de su calidad de vida. El no poder vivir la vida de forma plena y como desean, es una consecuencia tan grave como cualquier aspecto relacionado con la morbimortalidad de la enfermedad.
- La pérdida de peso, no importa cuánto, mejora muchos aspectos de la calidad de vida.
- Las personas obesas suelen tener baja autoestima, ansiedad, sentimientos de culpa y autorreproche y suelen frustrarse por no cumplir con estereotipos físicos ideales en la sociedad.
- Se supone que los pacientes con peor calidad de vida son aquellos con mayor peso y por ello al reducirlo se benefician aún más de esa pérdida. Únicamente un 11% de los pacientes con obesidad grave deciden someterse a un tratamiento médico para reducir su peso, aún conociendo los beneficios tan importantes que conseguirían.
Controla tu peso, evita el sedentarismo, come saludablemente; la prevención es la mejor arma para evitar los problemas de salud relacionados con la obesidad. Y no dudes en ponerte en manos de profesionales si lo necesitas, estamos aquí para ayudarte a mejorar tu salud y tu calidad de vida en todos los aspectos. No solo es una cuestión estética, es cuestión de salud.
